La Divina Comedia es una de las obras cumbres de la literatura mundial, entre otras razones, porque es citada innumerables veces por los autores contemporáneos, y porque a comienzos del siglo XIV, fecha de su redacción, fue toda una revolución ya que su autor muy metido en la historia de la época, expresa en ella las luchas entre el imperio y los reyes, el Papa y el Emperador, entre las mismas ciudades italianas, entre el papado y los reformistas, … y da una visión novedosa de todo aquel entramado de la Edad Media, que mucha veces nos lo pintan oscuro y que fue sobre todo una época de mucha luz.
Es muy recomendable su lectura, aunque puede resultarnos un poco difícil, primero porque Dante escribe en verso, y nosotros lo leemos traducido en prosa, luego porque es necesario ir leyendo las notas que van explicando cada uno de los pasos que da, porque si no el lector se puede sentir perdido. A la vez, nos vamos a ir dando cuenta de la calidad del libro, porque el autor conoce a la perfección toda la cultura griega y latina, entre otras cosas porque el que conduce a Dante en gran parte del libro es el gran poeta Virgilio, que representa a la razón y dónde puede llegar el hombre con ella delante de Dios. Pero también, conoce a la perfección y cita la Sagrada Escritura, los Santos Padres, la filosofía antigua y medieval, los grandes teólogos de su época,… Si queremos darnos un baño en un mundo de valores humanos y divinos necesitamos leerla.
En el tiempo que escribe Dante, existían dos tipos de géneros de escritos, las tragedias que acaban con la muerte del protagonista, y las comedias que son una historia con alguna recomendación. Dante habla de la muerte, de lo que nos espera tras esta vida, pero su libro no acaba mal, por ello, le puso el título de Comedia divina, ya que habla de lo que Dios hace por cada uno de nosotros. De hecho en la última parte del libro Dante es guiado por la gracia divina, representada en su amada ideal llamada Beatriz, que lo lleva a la contemplación de la vida del mundo futuro y de Dios.
Nos ha llegado a nuestra vida el adjetivo dantesco para describir todo aquello que nos parece terrible y destructivo, que es como se describe el infierno en esta obra, y es cierto que usa unas imágenes de gran crudeza, pero que nos ponen en la verdad y en la realidad del mal en nuestro mundo. La obra tiene tres partes, la primera el Infierno, la segunda el Purgatorio, donde están como el mismo dice los que quieren ser como un junco que se dejan llevar por el viento, los que son corregidos con lo contrario que hicieron en este mundo, así por ejemplo, se encuentra con unos que están siempre corriendo, que son los perezosos, otros están tumbados en el suelo comiendo tierra y de espaldas hacia Dios, representan la avaricia del que solo quiere lo de este mundo. Por último llega al Cielo o Paraíso, donde a través de diversas etapas, nos da una verdadera lección de vida y teología, reflexiona sobre la libertad, la redención, la contemplación, lo que nos espera después de a muerte, y sobre la Iglesia, de la que critica lo negativo y ensalza todo lo bueno ya que es la que nos lleva a Dios.
3 comentarios:
Desgraciadamente, a pesar de todas las virtudes que expones sobre la obra, la gran mayoría del mundo y de los autores que la citan lo hacen por su descripción que en ella se hace sobre el infierno.
Por cierto, no la he leido pero le tengo unas ganas impresionantes. Saludos!
Bueno dante es muy expresivo y sus figuras son originales, al menos la manera como las usa...con respecto al comentario de ermoya. Es propio del ser escoger lo que más le impacta, pero es digno de admirar a las personas que a toda actividad le sacan lo bueno...tambien miro a Dios en toda la obra..te animo a que la leas.
Bless
hola
emmmm hhhh .....realmente debo admitir que no la he leido pero que mi profesora hara que lo lea . por lo que he visto se ve bastante buena y voy a esperar el momento para leerla para una prueba
adios
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